Toc toc… y de nuevo la fuerza de la consciencia irrumpe en mi sueño como aquel día en el que me ayudó a encontrar mi voz en el silencio…
Respiro, mi mente se queda en blanco y me vuelvo a preguntar algo contrariada: Si no quieres nada, entonces ¿para qué me despiertas?… esta vez ya no siento ese enfado de niña autoconsentida y arrogante de antaño porque la propia consciencia me sostiene con su sonrisa.
Respiro sonriente, que bueno volver a sentirme herramienta no ya desde la obligación y el miedo de mis inicios, sino desde el amor de un corazón que ha logrado sanar sus heridas.
Respiro… silencio… un mosquito se posa en mi pantalla pero ya no siento rabia aunque me incomode… me sorprendo esperando a que la consciencia se manifieste para dictar mis siguientes palabras pero no sucede; y desde la propia consciencia, que vuelve a sostenerme y me ayuda a ver que por ahí tampoco es, el orgullo hace un intento de asomo que la consciencia transforma nuevamente en sonrisa.
Respiro, respiro y vuelvo a respirar agradecida a Benjamín por la importante comprensión que acabo de hacer aunque ahora haya vuelto a quedarme muda… no surgen palabras pero siento confianza, mi corazón sabe por dónde es como siempre aunque yo no sepa explicarlo.
Foto de Olga Jiménez García
Fisionaturopatía y Fisioestética
Terapia holística ‘Análisis Quantum’
Terapeuta, Profesora y Entrenadora de Integración Emocional
Conciencia y consciencia
Filosofía Experiencial
Investigadora y Escritora del Ser Integral
Olga, me han encantado tus palabras , tan inspiradoras. Un placer haber compartido contigo este encuentro tan especial en la consciencia.
Muchísimas gracias por leerme, me alegro que te hayan gustado. Y sí, un placer compartir consciencia y tan buenos momentos ❤️🌺