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Y BAILÓ (CAP. 18)

«Y tomó la vida respirando hondo, atreviendose a soñar. Lanzándose a cada uno de los vacíos donde sentía su corazón latir más fuerte. En su humanidad sintió sus caídas, se estampó en el suelo una y otra vez mientras paradójicamente su alma sonreía por su valentía y por su constancia en el amor. Y bailó, bailó incesantemente los compases del espacio y del tiempo, con pasión y miedo al unísono, pero bailó, confiando siempre en cada una de las coreografías diseñadas para ella. Y jamás, aún a pesar de muchas lágrimas, jamás dejó de sonreír a esa vida mágica que sentía en sus venas y en el aire que la envolvía.» 20.10.2018

Fotografía de Pixabay
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