Se quedó en un cajón, nunca se llegó a publicar pero me ha gustado recordarlo.
«Es cuando estás chapoteando en el lodo después de todas las veces que subiste y bajaste en vez de hundirte; es cuando aceptas que en vez de ahogarte puedes jugar entre el fango; es cuando en vez de sentir que has tocado fondo y ya no puedes más, sientes que llegaste a lo más hondo por un motivo; es entonces cuando eres consciente de que has llegado ahí para empezar de nuevo y te das cuenta de que nunca más serás de la misma manera, de que nunca más repetirás algo que no te pertenece porque esta vez al fin habrás aprendido; en el camino del autoconocimiento podemos pasar una y otra vez por experiencias similares y no darnos cuenta de que en el fondo son un patrón de aquella que lo creó, en cada pasada podemos crecer un poco pero a veces nuestra atención no lo puede abarcar todo y nos desesperamos, si sucede no debemos impacientarnos porque nuestra intención nos ayudará a lograrlo sin ninguna duda, tardemos lo que tardemos es importante no rendirnos cuando tenemos un propósito que nos ayuda a mejorar como personas porque el éxito está asegurado. En el aprendizaje muchas veces cometes una y otra vez los mismos errores y no eres consciente porque simplemente se han disfrazado, la guía que te dice realmente cuando has cambiado de rumbo es tu estado, si una relación que parece distinta te lleva a vivir situaciones del tipo que sea en las que aparece el sufrimiento, búscale la cremallera. Eso sí, estoy convencida de que por más piedras que nos encontremos en el camino no debemos dejar de creer en el amor, la vida es un sendero y siempre nos encontraremos cantos, pero en vez de desconfiar y dejar de dar lo que somos pienso que lo importante es hacernos valer con la total seguridad puesta en nosotros mismos y cortar aquello que no nos convenga, pero volver a nuestra esencia en cualquier otra relación que comience. Atraes aquello que transmites, te enamoras de aquello que te puede ayudar a crecer y no hablo solo de relaciones románticas, sino también de amistad, recuerda que no tienes porque estancarte en una relación si sientes que ya no te aporta nada, a veces hay que mirar a los ojos con firmeza y decir adiós cuando el aprendizaje se ha llevado a cabo y en vez de seguir avanzando la experiencia se convierte en algo doloroso. A veces dejar a alguien sintiendo amor hacia ella en una parte de nosotros, pero reconociendo que es lo mejor para ambos, nos lleva a que la próxima experiencia también vibre en el amor y que nunca dejemos de sentirlo dentro de nosotros. Algo que también he aprendido es que al decir adiós también es importante dar las gracias y quedarte con el aprendizaje, el crecimiento y lo mejor de lo vivido; es importante saber lo que uno quiere y lo que uno no quiere para la próxima vez, pero seguro que si esa persona estaba ahí en ese momento y te hizo sentir algo bonito fue por una razón superior e importante, quédate con eso y pasa página con la mayor felicidad y sabiendo que has hecho lo mejor para ti e incluso para el otro en todo momento.» (Fragmento de ‘Una ventana al alma’ 22.10.2012)
Releo mis palabras y recuerdo las del «El plan de tu alma» y me doy cuenta de que no lo he estado haciendo tan mal. Fragmentos de mi vida vividos desde el saber del fondo de mi alma, momentos intuidos y pensados detenidamente que me llevaban al amor y al sufrimiento al tiempo porque me creaban contradicción, porque no podía sentirlos en unidad; me sentí dividida en muchas de las experiencias que después de una lucha interna decidí vivir. Leer a Robert Schwartz me confirma el plan de mi alma y me ayuda a sentirlo por entero en mi corazón lo cual me unifica y me reconcilia conmigo misma. Gracias Gracias Gracias.
Fisionaturopatía y Fisioestética
Terapia holística ‘Análisis Quantum’
Terapeuta, Profesora y Entrenadora de Integración Emocional
Conciencia y consciencia
Filosofía Experiencial
Investigadora y Escritora del Ser Integral
Tenía un amigo, un músico, y después de muchos años de amistad descubrí que me había mentido y manipulado, fue devastador para mí y ahora ya no quiero conocer a nadie. Estaba traumatizado, decepcionado y destruido dentro de mí. También he escrito libros pero nunca hablo de ellos con nadie. No hago publicidad, no le pido dinero a nadie, no he puesto pancartas en mi blog, sufro pero muchas veces ya no lo digo porque ahora es inútil.