Hoy me apetece enfrentarne al blanco sin tener nada que decir, me gusta mucho que la inspiración me sorprenda cuando dejo la mente a un lado…
Respiro, respiro y sonrío con mis manos apoyadas en mi pecho sosteniendo este encuentro conmigo misma.
Siento mi cuerpo mientras respiro, lo escucho, me dice que está algo cansado y que ese baile entre el silencio y la respiración le hace mucho bien.
Respiro y voy observando las tensiones que van apareciendo en mi cuerpo y a medida que las voy soltando la gratitud asoma en el telón de fondo.
Vuelvo a cerrar los ojos con la sonrisa y la gratitud instaladas en ese silencio…
En la profundidad del silencio visualizo cosas inconexas que no intento entender que se van colocando en el movimiento de ese baile y que se armonizan en la serenidad de un sentir que no se ve perturbado.
Sigo respirando…
Respiro y observo un cambio en mi temperatura corporal, hay un aumento de calor, siento la liberación de un fuego innecesario que inconscientemente quemaba por dentro generado por la cotidianeidad de la vida.
Respiro, mi piel también respira desde una libertad que estaba oprimida, y el frío que ahora la recorre equilibra la temperatura de mi cuerpo de nuevo.
Sonrisa, gratitud y piel al unísono en este momento… el blanco se ha convertido en un bello instante inspirado por compartir…
Foto de Jasmin Chew en Pexels
Fisionaturopatía y Fisioestética
Terapia holística ‘Análisis Quantum’
Terapeuta, Profesora y Entrenadora de Integración Emocional
Conciencia y consciencia
Filosofía Experiencial
Investigadora y Escritora del Ser Integral