Cierro los ojos y respiro antes de comenzar a escribir, llevaba mucho tiempo sin hacerlo pero como dice Manolo García «Si lo que vas a decir no es más bello que el silencio, no lo vayas a decir».
La aventura de ‘Ser cuerpo’ con Tere Puig es el viaje más apasionante que estoy haciendo en esta vida con mi cuerpo y mi alma de la mano; investigar, observar y aprender in situ, en el propio terreno, en mí misma, no tiene precio.
Cuando el cuerpo habla y se siente escuchado el amor se hace presente, el presente cobra presencia y la vida en la carne es el regalo.
Que sientas que hay más tensión en las manos que de costumbre, sin sentido visible, y eso te lleve a observar que existe una tensión corporal generalizada y te pongas a trabajar en ello, y después de una sesión liberes la tensión en la mitad de tu cuerpo, es un gran paso en la reorganización de un cuerpo traumado. Como siempre dice Tere, el cuerpo es adaptativo, se ajusta a las circunstancias de cada momento y se organiza de la forma más óptima para ese momento, pero si un suceso traumático afectó nuestra biología, es a través de la reconexión con él, a través de la consciencia corporal, cuando podemos ayudarle a actualizar el mapa para volver a Ser cuerpo.
Comenzó siendo una extraña tensión en las manos; después de dos sesiones enfocadas, y bueno, de tres años de clases escuchando ‘El punto de vista del cuerpo’, sentir ayer que mi caja torácica ya no necesita estar generando presión para proteger mis órganos, porque ya no hay peligro; sentir como mis pulmones pueden expandirse y respirar ya sin esfuerzo para estar en calma porque todo está bien; sentir como la carne deja de estar rígida porque ya pasó todo; y sentir la confianza interna que sentí en esa reorganización corporal, donde ningún movimiento era forzado, vale la alegría.
Infinitas gracias siempre Tere, gracias por ayudarme a decirle a mi cuerpo, sin poner mente, que el hombre que forzó mi brazo izquierdo al tirar de él y hacerme daño, cuando tenía seis años, ya no está, ya no va a venir, ya no me va a hacer más daño; gracias por ayudarme a ver con los ojos del cuerpo que estoy a salvo.
No buscamos nada excepto liberar esa extraña tensión en mis manos, la verdad se reveló por sí misma.
Foto de Olga Jiménez García
Fisionaturopatía y Fisioestética
Terapia holística ‘Análisis Quantum’
Terapeuta, Profesora y Entrenadora de Integración Emocional
Conciencia y consciencia
Filosofía Experiencial
Investigadora y Escritora del Ser Integral
