Hoy comparto una reflexión del 4 de noviembre, la Dana acababa de inundar Valencia…
«Hay momentos en que la vida te engulle y ves más allá de ti mismo y te sientes incluso culpable de sentirte mal, porque lo que tienes delante es infinitamente más terrible.
Hay instantes en los que quisieras dejar de sentirte egoísta por estar sufriendo por algo que comparativamente y siendo consciente sientes ínfimo.
Hay situaciones en tus ahoras que te ahogan por mucho que tú quisieses sentir alegría y las gotas de fiebre resbalan por tu rostro.
Hoy me pregunto porqué me siento así y el silencio es la respuesta, hoy me pido una tregua ante un dolor interno que no se realmente porque es tan intenso y me vuelvo a preguntar, en la voz de la calma aparecen rostros desesperados, sentires desbordados de impotencia, gritos inmersos en el lodo, miedo, confusión y desesperanza; cuanta tristeza en el crujir del corazón de un pueblo que se ha roto.
Hoy el barro de Valencia arriba a la orilla de mis pies descalzos dejando una huella de fango que permanecerá para siempre en la retina de mis latidos…»
Foto de Raúl Ortega en Pexels
Fisionaturopatía y Fisioestética
Terapia holística ‘Análisis Quantum’
Terapeuta, Profesora y Entrenadora de Integración Emocional
Conciencia y consciencia
Filosofía Experiencial
Investigadora y Escritora del Ser Integral
